Bogotá – febrero 2025
Para el 2025 es uno de los fenómenos más esperados, con proyecciones que auguran un crecimiento significativo en las ventas de vivienda. Este proceso se da después de un largo período de caídas en la demanda, influenciado por factores como la pandemia y los ajustes económicos que afectaron al sector.
Factores que Impulsa la Reactivación
Recuperación Económica y Reducción de Tasas de Interés: Uno de los factores clave es la mejora en las condiciones macroeconómicas y la reducción de las tasas de interés en los créditos hipotecarios. Las tasas de interés más bajas hacen que la compra de vivienda sea más asequible, tanto para compradores primerizos como para quienes desean mejorar su vivienda actual. El Banco de la República ha tomado medidas para estimular la economía, y esto tiene un efecto directo en el sector inmobiliario.
Oferta de Proyectos Residenciales: Bogotá y sus alrededores han sido testigos de una gran oferta de nuevos proyectos residenciales en las zonas más demandadas, como el norte y el sur de la ciudad, así como en municipios cercanos en Cundinamarca. Estos proyectos ofrecen una variedad de opciones que van desde viviendas de interés social hasta propiedades de gama alta, cubriendo un espectro amplio de compradores.
Recuperación de la Confianza del Consumidor: La incertidumbre económica de los últimos años generó una caída en la confianza de los compradores. Sin embargo, con la estabilidad de los precios y la previsibilidad económica, los consumidores están más dispuestos a realizar inversiones en bienes raíces. El sector inmobiliario ha logrado recuperar parte de su atractivo, especialmente debido a la percepción de que la propiedad es una inversión segura.
Auge de las Viviendas de Interés Social (VIS): La vivienda de interés social continúa siendo un segmento clave en la reactivación. A pesar de la suspensión temporal del programa Mi Casa Ya, el sector sigue recibiendo apoyo en diversas formas y se espera que la demanda de este tipo de vivienda siga en ascenso. Con el acceso a subsidios y un número creciente de proyectos en este segmento, los compradores de bajos y medianos recursos siguen teniendo oportunidades para acceder a su primera vivienda.
Mejora en la Infraestructura y Movilidad: El desarrollo de infraestructura vial y la ampliación del sistema de transporte masivo como el TransMilenio y las nuevas líneas del metro, mejoran la conectividad de los sectores más alejados de la capital, lo que convierte a Cundinamarca en una alternativa atractiva para quienes buscan precios más bajos en zonas suburbanas pero con fácil acceso a Bogotá. Esto ha fomentado el crecimiento de nuevos proyectos residenciales en municipios como Soacha, Chía y Zipaquirá.
Proyecciones para el 2025
Se espera que en 2025 las ventas de viviendas en Bogotá y Cundinamarca crezcan en un 14% respecto al año anterior, lo que equivaldría a más de 63,000 unidades vendidas. Este repunte se debe, en parte, a la mayor disposición de los colombianos para adquirir vivienda, gracias a la recuperación económica y las condiciones favorables de financiamiento.
Retos a Enfrentar
Aunque el panorama es positivo, algunos retos aún persisten: Aumento de la oferta y demanda desbalanceada: La demanda creciente podría no ser suficiente para absorber toda la oferta de viviendas, lo que podría generar un exceso de inventario en ciertos segmentos.
Costo de los materiales de construcción: A pesar de la estabilidad económica, los costos de los materiales de construcción siguen siendo una preocupación. La inflación global y los aumentos en los precios de las materias primas podrían impactar los costos de nuevos proyectos.
Accesibilidad a la vivienda: A pesar de la mejora en la financiación, muchas familias de ingresos medios siguen encontrando dificultades para acceder a viviendas con precios competitivos. Las políticas públicas deben seguir priorizando el acceso a la vivienda asequible.
Redacción: Actualidad Inmobiliaria