¿Por qué la cédula digital es un gran avance para Colombia?
Bogotá – junio 2021
Aunque para muchos no está en el radar, Colombia obtuvo un logro muy importante: se ubicó en el tercer lugar en el índice de Gobierno Digital 2019 (Digital Goverment Index – DGI), superada solo por Corea del Sur y Reino Unido. Este ranking es medido por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) que evaluó las políticas de transformación digital en los 33 países que mueven el 80% de la economía en el mundo.
La cédula digital fue la protagonista de este logro. No obstante, para que haya un verdadero avance en la política de Gobierno Digital se debe implementar la cédula digital como mecanismo de identificación en los trámites con las entidades del Estado y así permitir que haya plena identificación en los trámites remotos de los ciudadanos. Este aspecto se inició con el modelo de Servicios Ciudadanos Digitales a través del Decreto 620 de 2020, donde se estableció el servicio de autenticación digital. Allí se precisan los mecanismos más robustos y seguros en materia de identidad digital que son: los certificados de firma digital y la cédula de ciudadanía digital sumada a la biometría facial, cotejando dicha información contra las bases de datos biográficas y biométricas de la Registraduría.
LA IDENTIDAD DIGITAL EN EL MUNDO
A nivel internacional y desde el punto de vista normativo existe un referente de obligatoria consulta que es el modelo eIDAS (identificación electrónica y servicios de confianza de la UE por sus siglas en inglés). Siguiendo la línea de dicho modelo, la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional (CNUDMI) definió las disposiciones sobre la utilización y el reconocimiento transfronterizo de sistemas de gestión de la identidad y servicios de confianza. Este modelo será otro de los referentes que deberá observar nuestro país.
En Latinoamérica un caso interesante se da en Chile con el uso de la Firma Electrónica Avanzada (FEA) que en Colombia conocemos como firma digital. Nuestro país está aterrizando su modelo de autenticación digital, sustentado en los servicios de confianza (modelos eIDAS) con cuatro niveles de autenticación. Estos son: niveles bajo y medio, donde utilizamos firmas electrónicas como claves, contraseñas, preguntas reto o multibiométricos sin consultar la Registraduría, y niveles alto y muy alto, donde encontramos la firma digital, la cédula digital y la biometría facial consultando la base de datos de la Registraduría.
PAÍSES CON CÉDULA DIGITAL
Los países que ya utilizan la cédula de identidad digital son: Afganistán, Argentina, Alemania, Austria, Bélgica, Chile, Eslovenia, Estonia, España, Francia, Guatemala, Israel, Islandia, Italia, Luxemburgo, Países Bajos, Perú, Portugal, Reino Unido, Rumania, Suecia y Uruguay. El gran avance de Colombia en ese sentido es que nuestro documento de identidad tiene dos formatos: el físico en policarbonato y el digital al que accedemos desde nuestro teléfono móvil. Además, a partir de dicho documento 100% digital se podrán acceder de manera remota a trámites con el Estado sin necesidad de contar con dispositivos de lectura adicionales como sucede por ejemplo en España.
Por fin, en nuestro país, cualquier autoridad podrá verificar en tiempo real ante la Registraduría -a través de la lectura del código QR- nuestra identidad. Saber si la cédula está vigente o ha sido cancelada, cuando, por ejemplo, se hable de la muerte de una persona, de doble o múltiple cedulación, o si está activa en caso que el ciudadano la haya reportado como extraviada.
Así mismo, los particulares como entidades financieras, notarías, cámaras de comercio, empresas de telecomunicaciones, prestadores de servicios públicos, entre otros, podrán integrar en sus aplicaciones y portales web la cédula de ciudadanía digital para validar la identidad de sus usuarios. Esto se llevará a cabo por medio de operadores biométricos autorizados por la Registraduría Nacional.
Fuente: https://www.portafolio.co/